Oración del Miércoles Santo

Señor, te agradecemos, como Simón y María de Betania, que nos acompañes y sanes nuestras vidas, ayudándonos a no abandonar ni traicionar en momentos difíciles, como Tú sufriste la traición de Judas que te vendió́ y de Pedro que te negó”. Haznos valientes, generosos y fieles hoy y siempre.

Tú eres nuestra confianza, líbranos de las iniquidades, devuélvenos la esperanza.

Tú, Señor, que lloras por esta pesadumbre, en este camino de calvario, que tu Amor redima nuestra pena y dé salud a tanta herida.

Miremos a los valientes, en su plenitud de amor  por la gente, repartiendo ayuda a los hermanos. Héroes que salen a la luz en estos días, para servir e iluminar el rostro de los afligidos.

Señor, ante certezas que se desmoronan, sentimientos que oprimen corazones, que sepamos decir una palabra de aliento, sirviendo, ofreciendo nuestra paciencia y alegría.  

Jesús, que es LUZ, nos dice: ‘Ánimo, abre el corazón a mi amor; sentirás mi consuelo, que te sostiene y está siempre a tu lado’.